¿A QUÉ HEMOS VENIDO?

Objetivo

Generar un espacio donde los jóvenes expresen las expectativas trazadas desde su propia realidad de vida, invitando así a iniciar un seguimiento en la persona de Jesús para fortalecer el proceso del Grupo Juvenil.

Materiales

Huellas

Semillas

Cartel con una frase que diga Bienvenid@

Copias ficha Anexo No 1 para el análisis

Copias ficha No 2 para el discernimiento

Velas para cada joven

Lápices.

Motivación a la experiencia
 

El catequista previamente elaborará unas huellas con el nombre de cada integrante del grupo juvenil, las ubicarán en el piso con una semilla al lado formando un camino hacia el sitio de la reunión y en la entrada del salón un cartel que diga Bienvenid@s, se invitará a l@s jóvenes, que busquen las huellas y la recojan junto con su semilla que le corresponde a cada uno.

Cuando todos hayan terminado, se lanzará el interrogante

¿Qué les impactó?

Descripción de la experiencia.

Previamente el catequista tendrá diseñada una obra teatral, para presentar a l@s participantes, que busquen mostrar las distintas motivaciones o desmotivaciones para iniciar un proceso de formación para el  grupo juvenil. Para elaborar el guión se debe tener en cuenta las siguientes eventualidades:

    A)      el joven inicia el proceso del grupo juvenil porque sus padres lo obligan a venir

    B)      el jóven que inicia el proceso del  grupo juvenil porque está en busca de novi@ o de conocer amig@s   

    C)      el joven que ingresa al proceso porque todos sus amig@s están en el proceso y el no quiere quedarse sin hacerlo ¿para dónde va Vicente? para donde va la gente

    D)     el jóven que ve que es tiempo de crecer espiritualmente.

Terminada la obra teatral, el catequista hace la siguiente pregunta: 

¿qué escenas lograron identificar en las obras?

¿cuáles son las motivaciones que llevan al joven para pertenecer a los grupos juveniles?

Para  el comienzo  de la catequesis  más que indispensable, es agradable el saber cuales son las expectativas que mueven a los  jóvenes para estar acá en el grupo juvenil; porque por medio del diálogo y el proceso que se vaya ofreciendo a los jóvenes durante las reuniones nos daremos cuenta tanto nosotr@s como catequistas como ellos, de que estas expectativas variarán  pero en un sentido progresivo y de más compromisos; siempre y cuando tu como catequista sepas despertar ese interes en ell@s y motivarlos no solo a trabajar y estar vinculados a la parroquia por medio de este proceso sino a través de otros grupos apostólicos acorde a su perfil y motivación.

Por tanto es indispensable que tu le compartas a ellos, ¿cuáles son sus expectativas como catequista que los orientara por este proceso de catequesis. Para este diálogo, es bueno que tengas en cuenta lo observado en las obras de teatro realizada en la descripción de la experiencia, tratando de hacer una comparación, las motivaciones que deben tener sus integrantes y los objetivos que persiguen.

¿qué es la catequesis para el grupo Juvenil?

Es un espacio de formación personal, espiritual, religiosa y social, brindado por la parroquia a los jóvenes que pertenecen a la comunidad o barrio, que llegan a este grupo juvenil , para prepararsen espiritualmente y a crecer en su fe, aquí se llega a adquirir un compromiso de fe más profundo y a comprometerse más con la parroquia...

 En conclusión, todo lo que se elabora previo a la catequesis son sólo unos esquemas que sirven de ayuda al catequista para llevar a cabo su misión evangelizadora entre los jóvenes, con unos conocimientos específicos; pero que se le hacen las adecuaciones y reestructuraciones necesarias según los casos que se vayan presentando en el caminar del grupo y los comportamientos que broten del mismo.

Discernimiento

El catequista previamente debe elaborar varias fichas semejantes a los contratos laborales, en la cual las clausulas serán definidas por aspectos humanos, cristianos y espirituales. Anexo 2 En un salón oscuro o preferiblemente en el templo, ubicarán los contratos y les regalarán a cada uno una vela, invitandolos a que los llenen y los lean para terminar firmandolos ante los ojos de Dios; después de firmarlo, deben encender la vela como signo de compromiso consigo mismos, con sus catequistas y con sus compañeros.